Dentro huele a campo pues el esparto es una gramínea que crece salvaje por las zonas de secano de la Península y del Magreb. Objetos rurales como cuerdas, botijos, botas y garrotas componen su establecimiento, que originalmente estaba en la calle Cuchilleros [ahora está en Mediodía Grande]. Juan aprendió el oficio de su padre y éste de su padre, también llamado Juan Sánchez, que fundó el negocio en 1927.
El último espartero de Madrid
Juan Sánchez regenta en La Latina un negocio abierto por su abuelo en 1927
El Mundo
JUAN SÁNCHEZ (espartero)
``Si no se recoge el esparto se va a echar perder porque si no se arranca se asfixia a sí mismo y va a tener dos repercusiones: se van a perder todos los atochales y se va a erosionar la tierra porque es lo único que la sujeta en muchas zonas. Es lo único que crece ahí. A la larga vamos a sufrir una desertificación``